La comedia española ha dado de que hablar, y es que Señor, dame paciencia cumple con todo lo que promete: risas y desconexión total.
Para empezar, el guión es básico y simplón, no aporta nada nuevo, pero ofrece risas y chistes que tienen gracia y otros que no terminan de funcionar. Es una historia sobre los tópicos más españoles y la percepción que tiene la gente de esos tópicos. En un guión que no se corta lo más mínimo y saca lo bueno y lo malo del español, ¿qué podemos esperar? Pues alguna referencia entre alguno de nosotros, aunque siempre de forma cómica y sin ánimo de ofender. El reparto no podía ser mejor, liderados por Jordi Sánchez (cuya persona en la vida real es todo lo contrario a su personaje); Rossy de Palma como la responsable de esta historia, cuyo personaje llega a ser odioso a la par que divertido; Megan Montaner, David Casanova y el resto de actores llevan a cabo una dulce y encantadora interpretación que será difícil de olvidar tras todas las risas y llantos que nos ofrecen.
La fotografía es bastante destacable, como la dirección, que se compenetran bastante bien y ofrecen un producto de buen ver (visualmente hablando). Y la banda sonora, con Meccano de fondo con "Viviremos siempre juntos" y ese tema tan escuchado este verano "Solo si es contigo" juegan bastante en el film, que se hace notar lo suficiente como para no pasar desapercibida en absoluto.
Aunque no sea nada del otro mundo, Señor, dame paciencia ofrece comedia, entretenimiento y desconexión durante una hora y media, que nos viene bastante bien de vez en cuando. Una película totalmente desternillante y buena opción para ver entre amigos.
Nota: 7/10
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